n TIEMPO de Pensar en SIEGA! Un enfoque de oración de 8 Días ¡No se Pierdan la Celebración de Pentecostés!
| ¡Un TIEMPO de Pensar en SIEGA! Un enfoque de oración de 8 Días
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22 de Mayo, 2008
Queridos santos del Cambio:
Este verdaderamente es un tiempo para soltar las penurias y las perdidas de la época pasada para recibir gozo y experimentar una liberación hacia tu futuro. En el calendario bíblico hebraico, acabamos de entrar en la época de Pentecostés. Debemos hacer un “cambio” en nuestras mentes y nuestros procesos mentales hacia SIEGA. El Espíritu de Dios esta desarrollando y moldeando la forma o contorno de nuestro futuro. El esta dando dirección, significado y definición a como nos moveremos y seremos en los próximos días. Nuestra vida espiritual esta siendo disciplinada para que nuestro desempeño mental exceda nuestros niveles de creatividad del pasado. Nuevas ideas están siendo concebidas. Debemos ver qué entrenamiento necesitamos para avanzar como un nuevo y afilado instrumento. Estamos siendo reorganizados para que tengamos una apariencia nueva y distintiva.
En 1 Corintios 16:8 Pablo hizo el propósito de quedarse en Éfeso hasta Pentecostés debido a que una puerta le fue abierta para su ministerio. Hay muchas nuevas puertas formándose y siendo vistas por el pueblo de Dios en este momento. Sin embargo, hay muchos enemigos que están detrás de estos puntos de entrada hacia nuestro futuro. Pero el Señor dice: “No te enfoques en tus enemigos durante esta época, mira las nuevas aperturas formarse y alístate para entrar en nuevas oportunidades que cambiarán tu vida desde este momento. YO te daré gracia sobre tus enemigos.”
ENTENDIENDO PENTECOSTÉS
La fiesta de Pentecostés era conocida como la fiesta de las semanas (Éxodo 23:16, 34:22, Levítico 23:15-21, Números 28:26-31, Deuteronomio 16:9-12 y 2 Crónicas 8:13). Esta fiesta era observada tarde en Mayo ó a principios de Junio, 50 días después de la ofrenda de la hoja de cebada durante la fiesta del Pan sin Levadura durante la Pascua. Pascua es un tiempo para acordarnos de nuestra liberación. Pentecostés es un tiempo para darle gracias a Dios por nuestras bendiciones, abundancia y regocijarnos sobre la siega.
Las características de este tiempo incluyen gozo, alegría, y celebración. Durante esta fiesta, tu entras en un tiempo de ofrecimiento concerniente a la dedicación de primeros frutos (Levítico 23:9-14, 2 Samuel 21:9-10, Rut 2:23). Esta es la fiesta para darle gracias a Dios por Su abundancia, que representa bendición. En el Nuevo Testamento hay tres referencias a Pentecostés. Fuera de 1 Corintios 16:8, y Hechos 20:16, la referencia más común es Hechos 2:1. En ese día, después de la resurrección y ascensión de Cristo, los discípulos estaban juntos en una casa en Jerusalén y fueron visitados con signos de los cielos. El Espíritu Santo descendió sobre ellos y, nueva vida, poder y bendición eran evidentes. Los 120 se convirtieron en 3 000 en un solo día. ¡Pide que tus 120 se conviertan en 3 000! Los creyentes cristianos que estaban juntos en Jerusalén para observar esta fiesta, experimentaron el Espíritu Santo de Dios vertido sobre ellos de una manera milagrosa. Pedro explico que esto era para que se cumpliera la profecía de Joel.
La fiesta también era conocida como la Fiesta de la Siega (Éxodo 23:16, 34:22, Números 28:26-31, Deuteronomio 16:9-14; Levítico 23:15-22). La primera gavilla ofrecida en la Pascua y los dos panes con levadura marcaban el comienzo y el final de la siega de grano y santificaba la época de la siega. La característica distintiva de esta fiesta es la ofrenda de “dos panes con levadura” hechos con el nuevo maíz (elote) de la siega completada, la cual, conjuntamente con “dos corderos” eran mecidas delante del Señor como ofrenda de sacrificio de acción de gracias. Pentecostés también era el tiempo en que se dio la ley en el Sinaí (Éxodo 12:2,19). En Pentecostés, el Señor escribió la ley en nuestros corazones e inició la Época de la Iglesia. Esta fue la primera Fiesta que los cristianos participaron y celebraron. Este debe ser un tiempo de celebración cada año. Yo entiendo que la celebración de esta fiesta es sumamente importante. El aspecto espiritual de esto es necesario si hemos de multiplicarnos. Lee Salmos 147:14. Reconoce que el Señor te ha dado lo mejor para en año entrante (Salmos 147:14) y preséntale a EL una porción.
¡EL TIEMPO DE LA SIEGA!
Muchos de nosotros no entendemos el tiempo de la siega. Debido a nuestras vidas complejas, estamos muy removidos de la producción de nuestro suministro de alimentos y el origen de nuestra provisión. La siega era una época sumamente importante (Génesis 8:22, 45:6). Nuestras vidas deben estar alineadas y reconciliadas alrededor de una mentalidad de siega (Génesis 30:14, Josué 3:15, Jueces 15:1, Rut 1:22, 2:23, 1 Samuel 6:13, 2 Samuel 21:9, 23:13).
Revisita y revisa cuando tu o el linaje de tu familia tuvo un avance y pudo moverse hacia delante en algún tipo de cambio de siega y de mentalidad. Decreto que verán cuando cualquier maldición penetró el linaje de ustedes para robarles. Permite que el Señor te recuerde de los eventos que ocurrieron para matar, robar y destruir el progreso de tu siega. Permite que esto sea:
1. Una época de recoger (Zacarías 8).
2. Una época de juicio (Jeremías 51:33, Joel 3:13, Apocalipsis 14:15).
3. Una época de gracia (Jeremías 8:20).
4. Una época para que las Buenas Nuevas sean escuchadas (Mateo 9:37-38, Juan 4:35).
5. El final de una época o era y el comienzo de una nueva época de provisión (Mateo 13:39).
Debemos entender que la siega tiene un proceso:
1. La semilla era echada y surcada en las postrimerías del invierno.
2. Se ofrecía oración para la lluvia – la lluvia temprana y la lluvia tardía (Zacarías 10).
3. El grano era agarrado y cortado con la hoz (Deuteronomio 16:9, Marcos 4:29).
4. El grano era recogido en gavillas (Deuteronomio 24:5).
5. El grano era llevado a la era.
6. Se usaban herramientas para la trilla. Tienen herramientas para la siega.
7. El grano era aventado (echado al aire). Permitan que el viento se lleve tu tamo.
8. El grano remanente fue zarandeado en una criba (Amós 9:9). Algunos de ustedes están es este proceso.
9. El grano era traído al granero. Encuentren su granero.
Tu siega debe ser protegida porque la siega tiene grandes enemigos:
1. Sequía. Pídele al Señor que identifique y quebrante toda tu sequía.
2. Invasión de langostas. Pídele al Señor que remueva todo devorar de tu siega.
3. Enfermedades de las plantas (moho y lepra). Pídele al Señor que remueva cualquier moho en tu vida.
4. Vientos calientes y abrasadores. Pídele al Señor que desvíe los vientos abrasadores.
5. Guerra. El enemigo quería vivir de la tierra. Declara que cualquier enemigo que se ha comido tu siega se irá de tu territorio.
PRIMEROS FRUTOS, UNA CLAVE PARA LA BENDICION
Esta fiesta era también llamada “El día de primeros frutos” (Números 28:26) porque marcaba el comienzo del tiempo en donde el pueblo debía traer ofrendas de primeros frutos o primicias. Era una fiesta de gozo y de acción de gracias por el final de la época de la siega. Estas ofrendas eran presentadas como “ofrenda mecida” por el pueblo. La primera fruta madura, uvas, grano, aceite, vino, y el primer vellón eran requeridos como ofrenda (Éxodo 22:29; Levítico 2:12-16; Números 18:12; Deuteronomio 18:4; 2 Crónicas 31:5; Nehemías 10:35, 37, 39; Prov. 3:9; Jeremías 2:3; Romanos 11:16). En este tiempo, el Señor era acreditado como la fuente del grano y de la fertilidad (Jeremías 5:24). En el Nuevo Testamento el Espíritu Santo vino sobre los discípulos en Pentecostés (Hechos 2:1-4), en el tiempo festivo cuando los Judíos de distintas naciones estaban en Jerusalén para celebrar esta fiesta anual. El intervalo entre Pentecostés t Tabernáculos era el tiempo para ofrecer los primeros frutos. Pídele al Señor por tu ofrenda de primeros frutos.
Este es un tiempo para orar por la siega. El siguiente enfoque de oración de 8 días les ayudará a entender y a entrar en esta época de siega.
Bendiciones,
Chuck D. Pierce
Enfoque de oración de 8 días
Día 1: Lee Oseas 6, especialmente v. 11. Pídele al Señor que te reviva y te levante. Pídele a EL que te revele tu siega. “Para ti también, OH Judá, está preparada una siega, cuando yo haga volver el cautiverio de mi pueblo.”
Día 2: Lee Éxodo 23, especialmente v. 16. “También la fiesta de la siega, los primeros frutos de tus labores, que hubieres sembrado en el campo, y la fiesta de la cosecha a la salida del año, cuando hayas recogido los frutos de tus labores del campo.” Dale gracias a Dios por SU dirección; estate dispuesto a seguirle a EL. Dale gracias a EL que EL te ha dado primeros frutos.
Día 3: Lee Génesis 2 y 8:22. “Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.” Pídele al Señor que te revele tu época de siega.
Día 4: Lee Juan 16:7, 13. El viejo festival Judío obtuvo un nuevo significado para la iglesia cristiana por la promesa de la venida del Espíritu Santo. Pídele al Espíritu Santo que te llene nueva y frescamente.
Día 5: Lee Juan 17. Toma comunión. Pregúntale al Señor que revele cualquier relación horizontal que no este bien.
Día 6: Lee Job 5, especialmente v. 5. “Su mies comerán los hambrientos, Y la sacarán de entre los espinos, Y los sedientos beberán su hacienda.” Pídele al Señor como el enemigo ha tenido acceso a tu siega.
Día 7: Lee 1 Samuel 12, especialmente v. 17. “¿No es ahora la siega del trigo? Yo clamaré a Jehová, y él dará truenos y lluvias, para que conozcáis y veáis que es grande vuestra maldad que habéis hecho ante los ojos de Jehová, pidiendo para vosotros rey.” Pregúntale al Señor si hay algún juicio sobre tu siega.
Día 8: Lee Proverbios 6:8. La mentalidad de siega de las hormigas es mencionada como lección para el perezoso. Rompe con cualquier apatía que te esta deteniendo de moverte hacia delante. Memorízate Proverbios 20:4. “El perezoso no ara a causa del invierno; Pedirá, pues, en la siega, y no hallará.” Pídele al Señor que revele cualquier área de pereza en tu vida que te ha detenido de poder arar. Medita sobre Proverbios 10:5. “El que recoge en el verano es hombre entendido; El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza.” Rompe con el espíritu de pereza. Pregúntale al Señor si has descansado cuando debiste de estar recogiendo.
